BUDISMO - UNA FILOSOFÍA DE VIDA
SUFRIR O DISFRUTAR, SIMPLES ESTADOS MENTALES
El budismo insiste en la reflexión sobre qué es la felicidad y qué es el sufrimiento, y en última instancia llega a la conclusión de que ambos son "estados mentales". "Las circunstancias externas en sí mismas no son la causa de nuestra felicidad o nuestro sufrimiento, desde el momento que una misma circunstancia puede ser origen de dolor para una persona y de placer, o simplemente indiferencia, para otra. Los problemas, las dificultades, o son más que sensaciones desagradables que sólo parten de la mente, de nuestra interpretación, de nuestros engaños. La felicidad, por otra parte, sólo puede surgir de la paz interior, y sin paz interior ninguna situación externa puede hacernos felices".
OFRENDAS BUDISTAS
Las ofrendas se deberán de hacer en el altar diariamente. No hay límites en cuanto lo que se puede ofrendar y hay muchos tipos de ofrendas. Por lo general, uno puede ofrecer cualquier objeto que sea agradable a los cinco sentidos: forma, sonido, olor, sabor y tacto. Es costumbre ofrendar de siete a ocho cuencos con agua los cuales representan (de izquierda a derecha): agua para tomar, agua para lavarse los pies, flores, incienso, luz, perfume, comida y música. A veces no se pone cuenco de agua para la música, ya que esta se representa con la voz de uno mismo y los instrumentos musicales que se usan al recitar plegarias, flores, velas e incienso se ofrendan en sus respectivos cuencos o en algún otro lugar del altar.
Las cosas que se ofrendan deberán de estar limpias, nuevas y ser agradables. La comida deberá de estar fresca y ser de la mejor calidad, nunca comida vieja, de sobra o echada a perder. Los cuencos o platos con ofrendas deberán de estar llenos y verse abundantes. Es mejor ofrendar un cuenco pequeño que esté lleno, que un cuenco grande que esté malo.
Las ofrendas se deben de obtener por medios honestos, sin haber lastimado a algún ser y no por medio de robos o engaños. Las ofrendas externas no se deberán ver limitadas por los objetos que se encuentran en el altar, sino se deberían de imaginar en grandes cantidades, tan grandes como el espacio. Ofrenda el agua imaginando que es un néctar puro, agradable a todos los sentidos. Es importante pensar que todo el campo del mérito acepta las ofrendas, las disfruta y está complacido. Para hacer la ofrenda de cuencos de agua se deberán tener por lo menos siete cuencos. Mientras más grandes y de mejor calidad sean los cuencos, es mejor. Los cuencos siempre deben de estar limpios.
LA COMPASIÓN
Sobre la base de la compasión, que desea que los demás estén libres del sufrimiento, y del amor bondadoso, que aspira a que disfruten de la felicidad, cultivamos un sentimiento de responsabilidad especial. Así, la compasión no queda sólo al nivel de deseo o aspiración, sino que genera un sentimiento de compromiso y responsabilidad, yo voy a liberar a todos los seres del sufrimiento. Este tipo extraordinario de sentimiento de responsabilidad nos conducirá finalmente al logro de la bodichita, que es la intención altruista que aspira a alcanzar la budeidad para el beneficio de todos los seres.
EL ARTE DE LA FELICIDAD
- Todos somos seres humanos, con un cuerpo y un alma humana.
- Se puede alcanzar la felicidad mediante el entrenamiento de la mente.
- Cuando se carece de disciplina interna no importan las posesiones o condiciones externas, ya que estas nunca proporcionarán a la persona la sensación de alegría y felicidad que busca.
- La frontera entre lo negativo y lo positivo de un deseo o acción no viene determinada por la satisfacción inmediata, sino por los resultados finales, por las consecuencias positivas o negativas.
- Si vives contento, la consecución de bienes pierde importancia.
- La felicidad que depende principalmente del placer físico es inestable, un día existe y al día siguiente puede haber desaparecido.
- Si quieres tener una experiencia determinada, lo más lógico es buscar y acumular aquellas causas y condiciones que la favorecen.
- Alcanzar la verdadera felicidad exige producir una transformación en las perspectivas, en la forma de pensar, y eso no es tan sencillo.
- Primero hay que aprender y aceptar el valor positivo de las prácticas, luego incrementar la determinación, y finalmente llevarlas a cabo.
Existe un punto ciego, algo que no ves o no quieres ver sobre tu carácter. La manera de descubrirlo es a través de los demás. Los otros son espejos que reflejan tu personalidad. Cuando algo te molesta de otro, en el fondo estás reconociendo que, esa actitud también está en tí. Cuando sientes que no te afecta y puedes dar una respuesta serena, quiere decir que está desapareciendo de tí.
BUDA DE LA MEDICINA
Mantra del Buda de la Medicina
Este mantra te pone en contacto con la energía de la Salud y de la Sanción.
La salud no solo se refiere a la curación física de algún tipo de enfermedad, va a una sanación completa, a conocer la causa de la enfermedad, que se encuentra en la mente, en los pensamientos y emociones negativas.
Mantra del Buda de la Medicina
OM NAMO BHAGAWAT EBEKANTSE GURU BENDURYA PRABHA RANDZAYA TATHAGATAYA ARHATE SAMYAKSAM BUDDHAYA TAYATA OM BEKANTSE BEKANTSE MAHA BEKANTSE RANDZE SAMUNGATE SOHA
LA RUEDA DEL DHARMA
La Rueda del Dharma representa las palmas de las manos del Buddha. El Buddha enunció el Dharma para hacer girar la rueda del Dharma.
La rueda tiene ocho radios que representan el camino óctuple, visión correcta, contemplación correcta, habla correcta, conducta correcta, contemplación correcta, esfuerzo correcto, pensamiento correcto y concentración correcta.
Los practicantes normalmente giran la Rueda del Dharma doce veces, para conmemorar el primer giro de la Rueda del Dharma dado por Buddha Sakyamuni, dando las enseñanzas del Hinayana sobre las cuatro nobles verdades, la verdad del sufrimiento, del origen del sufrimiento, de la cesación de sufrimiento y del camino a la cesación del sufrimiento.
La rueda normalmente se gira tres veces por cada una de las cuatro nobles verdades.
La ofrenda de la rueda de Dharma es para desear que los seres sintieses tengan fortaleza y desarrollen la capacidad para que germine la semilla de la bodhicitta.
CON AMABILIDAD SUPERA LA IRA. CON GENEROSIDAD LA MEZQUINDAD. CON LA VERDAD SUPERA LA DECEPCIÓN (BUDA)
Transforma lo negativo en positivo. La sociedad te prepara para lo negativo, te reprime, te empuja por los caminos de la represión. Una persona inteligente no le sirve a la sociedad, ya que lo que necesita son personas obedientes, no inteligentes. Vive tu vida inteligentemente.
BUDISMO - UNA FILOSOFÍA DE VIDA
El budismo propone una visión del ser humano muy interesante: Que ya está en el paraíso - pero no lo sabe - no sabe, que ya está completo. Pero lo sospechamos, tenemos la idea que cuando "lo" consigamos seremos muy felices (causando el deseo). La sensación de carencia es la causa del sufrimiento, crea el deseo, que es insaciable, y de allí al desasosiego y a la angustia no hay más que un paso, desesperarse por satisfacer vehemente deseo tras deseo, se dice que es como tomar agua salada: da más sed. Sólo tendríamos que descubrir -por experiencia- que ya somos completos, que ya somos felices, para que el desuño de la carencia acabe. Y con ella todas sus secuelas de insatisfacción e infelicidad. Si vivimos enfocados y familiarizados con la satisfacción -que podemos llegar a verificar que poseemos la plenitud- eso será mucho más visible que existir enfocado en la insatisfacción, o en las cosas que no tenemos y que creemos indispensables para vivir. Creando por otra parte el consumismo, etc.
El corazón humano puede albergar nobleza, pero también crueldad. Cuando los impulsos negativos del ser humano, tales como la ira, la intolerancia, el resentimiento o el menosprecio a la vida llegan a un extremo, éstos desencadenan consecuencias deplorables como las guerras. La filosofía budista analiza la dualidad del corazón humano y enseña a orientar los impulsos negativos en dirección a lo positivo.
NECESITAMOS A LOS DEMÁS PARA NUESTRO BIENESTAR FÍSICO, EMOCIONAL Y ESPIRITUAL
Necesitamos a los demás para nuestro bienestar físico, emocional y espiritual. Sin los demás, no somos nadie. Pensar que podemos vivir de manera independiente en nuestro pequeño mundo no se corresponde a la realidad. Es más realista pensar que somos como una célula dentro del inmenso cuerpo de la vida, distintos de los demás, pero íntimamente relacionados con ellos. Dependemos por completo de todos los seres y ellos también se ven afectados por nuestras acciones. La idea de que es posible preocuparnos sólo por nuestro propio bienestar y olvidarnos de los demás, o incluso buscarlo a costa de ellos, es absurda.
Mientras más participamos nosotros mismos en la vida del Dharma, más hondo nos adentramos en ese enorme océano que tiene un solo sabor, el sabor de la libertad.
APLICATE EN EL DHARMA
El sabor de la liberación
Finalmente, el Dharma es "para que el sabio lo comprenda de manera individual". Cuando una persona alcanza la iluminación lo hace como sólo ella podría hacerlo. La iluminación de Nagaryuna se manifestó de un modo distinto a la iluminación de Vasubandhu, Tara o Mañjusri, Sariputra o Modgalyana, cada uno expresa su comprensión individual del Dharma y aún así, paradójicamente, mientras más lo asimilamos de una manera individual para nosotros mismos, más cerca estamos de comprender las profundas percepciones de los demás. Mientras más participamos nosotros mismos en la vida del Dharma más hondo nos adentramos en ese enorme océano que tiene un solo sabor, el sabor de la libertad. En el texto antes citado el Buda lo dice así:
Monjes, así como el poderoso océano tiene un sólo sabor, el sabor de la sal, del mismo modo, monjes, este dharma tiene sólo un sabor, el sabor de la liberación.
LA FELICIDAD ESTÁ DENTRO DE TÍ
Algunas personas han calificado al budismo como una religión negativa que identifica todo lo que experimentamos como sufrimiento y no reconoce felicidad en absoluto. Esta, sin embargo, es una visión mal informada. Es cierto que el budismo habla sobre nuestras felicidad habitual, la felicidad como el sufrimiento del cambio. Esto significa que este tipo de felicidad es insatisfactoria: nunca dura y nunca tenemos suficiente de ella. No es verdadera felicidad. Si, por ejemplo, comer helado fuera verdadera felicidad, entonces cuanto más comiéramos de él en una sentada, más felices llegaríamos a ser. Pero pronto alcanzamos un punto en el que la felicidad de comer helado se torna en infelicidad y sufrimiento. Lo mismo en el caso al sentarnos al sol o movernos a la sombra. Esto es lo que significa el sufrimiento del cambio.
El budismo, sin embargo, proporciona muchos métodos para superar las limitaciones de nuestra felicidad común, este sufrimiento del cambio, para que alcancemos el estado eternamente gozoso de un buda. Sin embargo, a pesar de los inconvenientes de nuestra felicidad común, el budismo también explica las fuentes para conseguir esa clase de felicidad. El pusimos proporciona esta enseñanza porque uno de sus axiomas básicos ese que todo el mundo quiere ser feliz y nadie quiere se infeliz. y, ya que todo ele ando está buscando felicidad y, como seres comunes, no sabemos de ninguna otra clase de felicidad que no sea la común, la acostumbrada, el budismo nos dice como conseguirla. Sólo cuando ese deseo y necesidad de felicidad ha sido satisfecho en el nivel más básico de la felicidad común, podemos aspirar a niveles más profundos, mas satisfactorios de ella, con avanzadas prácticas espirituales.
Lamentablemente, sin embargo, como el gran maestro budista indio Shantideva escribió en Involucrase en el comportamiento del bodisatva.
Aunque poseen la mente que desea evitar el sufrimiento,
Ellos corren precipitadamente dentro del sufrimiento mismo.
Aunque desean felicidad, producto de la ingenuidad.
Ellos destruyen su propia felicidad como si se tratara de un enemigo.
En otras palabras, aunque deseamos la felicidad, somos ingenuos sobre sus fuentes y así, en lugar de crear más felicidad para nosotros mismos, creamos solamente más infelicidad y dolor.
OM: Purifica el velo del cuerpo.
MA: Purifica el velo del habla.
NI: Purifia el velo de la mente.
PAD: Purifica el velo de las emociones conflictivas.
ME: Purifica el velo del comportamiento latente.
HUNG: Purifica el velo que cubre el conocimiento
Cada sílaba es por sí misma un mantra.
Comentarios
Publicar un comentario